lunes, abril 30, 2007

Cuando ellas se lanzan primero


Escribo estas líneas gracias a la iniciativa de una lectora que quiere saber cómo vemos los hombres a las mujeres que se lanzan abiertamente.

Como siempre, habré de reducirme a dar no una respuesta única (no la hay) sino varias, pues soy un defensor acérrimo de la diversidad y esto implica asumir que no todos los hombres (ni todas las mujeres, ni todos los homosexuales, ni todos los viejos, ni todos los niños, ni todos los todos) reaccionan igual frente a un mismo estímulo.

Al pensar durante varios días en el dilema en el que me colocaba al intentar contestar esta pregunta, se me venían a la mente imágenes y situaciones de toda mi vida. Pero hubo una que regresó recurrentemente con un sentimiento de indignación, así que comenzaré por ahí.

Cuando era joven, feliz e indocumentado tuve la fortuna de, por primera vez, hacerme novio con una persona excepcional. Ella era aparentemente tímida, pero no tenía el menor empacho en hablarme por teléfono todos los días. A ambos nos parecía de lo más lógico, pues mis actividades eran un tanto sedentarias y siempre estaba en la casa de mis padres, y las suyas eran un poco más peripatéticas y gran parte del tiempo estaba en la calle. Esto nos hizo creer que lo más adecuado era que ella me llamara a mí cuando estaba en su casa.

Pero a mi madre y a mis seis hermanas (ahora pienso, instaladas en el machismo) les parecía fatal el asunto. Por un lado sucedía que, cuando a ella se le ocurría llamar, era seguro que bloquearíamos la línea telefónica por lo menos durante media hora. Así que la consigna represiva fue una guerra de todas ellas contra la novia del hermano (a través del hermano), haciendo comentarios despectivos pues “una mujer que busca a un hombre es una rogona ”. Curiosamente mi padre, que en una lec tura pl ana debía haber sido el macho castrante, veía el asunto con beneplácito, pues de esa manera la cuenta del teléfono correría a cargo de la familia de ella.

El argumento era simple: “Si todas nosotras esperamos a que nos hablen nuestros novios, para que sus familias no piensen mal de nosotras, por qué razón ella te habla a ti”. El subtexto era: “Justamente cuando nosotras estamos esperando llamada, ustedes ocupan el teléfono y no tenemos oportunidad de hablar después”. Mi respuesta era muy simple: “Pues no sean tontas y háblenles cuando el teléfono esté desocupado y manden a la goma el qué dirán”.

En la retórica de colegio de monjas de mis hermanas, la manera de aniquilar cualquier posible diálogo era aseverar: “No, porque nosotras no somos unas rogonas ”. Y digo que ahí terminaba cualquier posibilidad de comunicación, pues siempre he considerado que la mejor manera de impedir entender al otro es incurrir en injurias e insultos, y a mí me dolía profundamente que lastimaran con ese adjetivo a la persona que yo amaba.

Yo, el hombre, nunca consideré que por el hecho de buscarme ella fuera una rogona , y nunca he visto mal que una mujer le diga sus sentimientos a un hombre antes de que él abra cartas. Por cierto, una de las cosas que más me indignaba de ese trato despectivo era que yo sabía que su personalidad no era la de una rogona ; sabía que existen y son arcilla de otra materia.

Más tarde, el mismo gineceo le puso un apodo a una ex novia de otro hermano que, mucho tiempo después de que habían terminado, lo seguía buscando: la crema de cacahuate , pues por aquellos años estaba de moda un chiste de un locutor que anunciaba crema de cacahuate, la misma se le pegaba al paladar y el chiste podía prolongarse indefinidamente, dependiendo de la capacidad mímica del contante, que, al terminar cada parte de la exposición, tenía que decir, balbuceando con una lengua pegajosa: “y la crema de cacahuate…, persiste”.

Creo que desde entonces tomé la firme resolución, indignado por la manera peyorativa con las que las propias mujeres de mi familia trataban a otras mujeres, de ver con total solidaridad a las mujeres que se les pega la gana tener iniciativas de cualquier índole. Por otra parte, debo confesar que me resulta cómodo, pues como yo mismo tengo una dificultad congénita para llevar la iniciativa y me aterra la incertidumbre del momento del lance; cuando alguna mujer me ha querido empezar a insinuar algo, de inmediato le allano el camino y le hago ver si es posible o no seguir adelante.

Pero antes de pasar a lo que he observado al respecto en otros hombres, me atreveré a esbozar una metáfora a través de la cual he reflexionado mucho sobre el problema: siempre he considerado que jugar ajedrez es la actividad humana que más se parece a estar sentado con una mujer tomando un café y estableciendo ese imaginativo, infinito y sorpresivo juego que se llama seducción.

Así que explicaré algo técnico para que se entienda mejor mi reflexión. Cuando el juego inicia, ninguno de los dos sabe cuáles serán las accion es y reacci ones del otro, pero sabe que tiene un objetivo. Si en el ajedrez se trata de matar al rey del otro y ese es el sentido de la partida, en la amable conversación quizá nada más se trate de llegar hasta su centro de poder, hasta esa parte del otro que decide sus movimientos. Finalmente, quien seduce espera participar en los movimientos del otro y el mejor ejemplo de esto es el más erótico de los juegos humanos: el baile.

Como las posibilidades son infinitas, tanto en el ajedrez como en la relación hombre-mujer (aunque haya reglas y costumbres), la capacidad creativa va más allá de cualquier prejuicio. Con esto quiero decir que eso de que los hombres tienen que llevar la iniciativa es tan relativo como la regla de que las blancas llevan la iniciativa por el hecho de hacer la primera jugada.

Y es que hay muchas formas de hacerlo diferente en ambos casos. Comúnmente se dice que, cuando las blancas salen con el peón del rey, es que quieren establecer un juego abierto. Ahora que frente a esa propuesta, que las negras pueden aceptar con otro peón de rey y realmente estar jugando abierto, también pueden optar por otras respuestas que se llaman juego semiabierto, es decir, en ese momento las negras hacen uso de su derecho a cambiar la propuesta del contrincante.

Ahora que si las blancas inician por un movimiento más pasivo, puede ser que las negras le den un giro al asunto y asuman la iniciativa del juego: ¿no es acaso lo mismo que nos pasa a los hombres y las mujeres? Si el hombre es franco y claro en sus intenciones y la mujer decide seguirle el juego, rápidamente bailarán un foxtrot entre las sábanas.

Pero si el hombre no quiere jugar póker abierto, la mujer puede decidir si abre cartas o le sigue el delicioso juego del misterio. Ahora que si de plano los dos se enfrascan en un lenguaje indirecto, pueden, como en el ajedrez, pasarse horas sin moverse de un mismo punto y a lo mejor así lo gozan más.

Cuál es la conclusión: que depende del hombre y de la mujer que se trate, an tes d e juzgar moralmente su conducta. Por ejemplo, el otro día solté una carcajada cuando escuché en una entrevista a una escritora que admiro y respeto, Beatriz Escalante, que hablaba de dos personajes femeninos de una novela suya: una chica era del tipo pasivo y reprimido que en cualquier relación con un hombre considera que tiene que haber amor de por medio para que haya sexo, y la otra veía el asunto como quien juega el tenis, es decir, si encontraba alguien con quien jugar un rato, pues a la cancha y ahí nos vemos después.

Ese comentario me dio la clave de que la interpretación de la manera de llevar la iniciativa de una mujer puede depender de la lectura de la vida que tengan ella y el hombre que se topa. Esto quiere decir que el riesgo que toma ella es enorme, pues la enorme proporción de machos prejuiciosos con los que se topa uno por ahí es tremenda, y el riesgo aumenta si ella no tiene clara su posición al respecto.

Una vez, platicando con un amigo al que considero bastante liberal y abierto (de esos que se la pasan jugando al tenis sin broncas culpígenas ni nada por el estilo), me decía que ya estaba harto de chavas que, de entrada, parecían bastante liberales y después le salían con que “las había usado”. Su conclusión final me mataba de la risa: “¿qué no se había entendido desde el principio que ella(s) también me estaba(n) usando a mí?”.

Lo cierto es que la sociedad es un monstruo de muchas cabezas y la mayoría de la población no se ha saneado correctamente al respecto, pues, ya entrados en el asunto de escribir este artículo, le pregunté a varios que conozco qué habían pensado en el momento en el que una chava se les había lanzado . Ya por el tono con el que me contestaron, ya por la mirada pícara que saltó a sus ojos, deduzco que no hay hombre que no sienta una especie de orgullo deportivo cuando le sucede.

También le pregunté a varias mujeres qué sucedía en ellas en el momento en el que se lanzaban ; me contestaron que era una especie de pasón de adrenalina muy curiosa, porque sabían que era mucho lo que estaban arriesgando. Y es que ambos, sea quien sea que lleve la iniciativa, saben que antes y después todo cambia, como dice Lupe Pineda.

Veamos, pues, el asunto con cierta distancia. En cierta ocasión escuché no sé dónde una teoría extraña que no dejó de llamarme la atención. La psicóloga o sexóloga que lo dijo, afirmaba que des pués de la primera mirada entre dos personas que se atraen queda automáticamente establecido quién tendrá el cetro del poder de la relación: “aquel que aparta primero la mirada de los ojos del otro”. El asunto, con el tiempo analizado en la práctica, resultó una mafufada , pues estoy convencido de que esto se va modificando de acuerdo con la historia de la pareja.

El caso es que, si las cosas no salen bien, aquel(la) que se atrevió a llevar la iniciativa, inmediatamente será juzgado. Y si salen bien, con el tiempo el ego de cada uno se encargará de acomodar a su favor la crónica de los acontecimientos. Esto lo corroboré cuando decidí preguntarles (por separado) a mi madre y a mi padre cuando ya tenían como 40 años de casados, cómo fue que se conocieron: me contaron dos historias por completo diferentes. Seguramente ninguna de las dos correspondía con exactitud a la realidad, que debe haber sido más hermosa.

Finalmente hay algo que me atrevo a explicar como última reflexión. Creo que cada vez es menos juzgado, tanto por hombres como por mujeres, que una mujer se atreva a lanzar el chon abiertamente; lo que habría que revisar es la actitud que uno y otra toman en el proceso; eso es lo que puede darnos una luz sobre las lecturas despectivas que se hacen al respecto.
Como diría Patxi Andion, si yo fuera mujer no me reprimiría al respecto, pero me fijaría bien a qué clase de hombre me le podría lanzar y a cuál no. Estaría consciente de que sienten algo así como la euforia de haber metido un gol en la cancha, por la educación de su ego (igual que las mujeres), pero trataría de distinguir quién lo interpretaría como un gesto de sumisión y quién lo vería como un impulso natural y sabría valorarlo.

Y es que conozco un buen de amigos, bien situados al respecto en su lectura de la vida, que frente a las mujeres de arranque se quitan el sombrero y las miran con un cariño conmovedor, pero también conozco una cantidad infinita de patanes que de p... no las bajarían.

Al respecto, creo que revisar la novela europea del siglo XIX, y en especial el ensayo del amor de Stendhal, nos daría luces impresionantes pues es cierto que muchas veces no es el acto, sino el momento, lo difícil de escoger.

viernes, abril 27, 2007

En peligro de extinción las cactáceas de México.


México ocupa el primer lugar en diversidad de cactáceas, pero también es el de mayor amenaza para estas plantas, donde la Echinocactus grusonii, de Querétaro, ya tiene reporte de desaparición por saqueo, informó la especialista María del Carmen Mandujano.


México ocupa el primer lugar en diversidad de cactáceas, pero también es el de mayor amenaza para estas plantas, donde la Echinocactus grusonii, de Querétaro, ya tiene reporte de desaparición por saqueo, informó la especialista María del Carmen Mandujano Sánchez.
La investigadora del Instituto de Ecología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) precisó que en el registro de especies en riesgo de la República mexicana, consignado en la NOM-059-2001, este grupo es el primero en peligro de extinción.
Esta advertencia también se repite en la lista de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, y de la Convención Nacional para la Regulación del Comercio de Especies Amenazadas, agregó.
En un comunicado, expuso que el comercio ilegal es la causa principal de la desaparición de varias especies de cactus, y puso como ejemplo la Ariocarpus scaphirostris, la cual ha reducido su población 80 por ciento en 20 años.
Sin embargo, existen otros factores que han agravado el problema, como el cambio de uso de suelo, que en el caso de la especie Ariocarpus kotschoubeyanus ha desaparecido en cantidad pues su entorno cambió a la agricultura.
De igual forma la Echinocereus schmollii, cactus raro endémico del desierto de Querétaro, cuya amenaza ha sido por extracción de materiales, como arena, grava, roca y cantera.
Mandujano Sánchez indicó que México es un territorio rico en esta variedad y que en los últimos cinco años se han descrito dos nuevos géneros, pero no se han dado a conocer los lugares donde se encuentran para que no sean destruidas, "aunque algunos ejemplares circulan ya en el mercado internacional".
Mandujano Sánchez explicó que México es un territorio rico en variedades; incluso en los últimos cinco años se ha descrito un nuevo género Digitostigma, con una única especie, caput-medusae.
Otro ejemplo es la Mammillaria luethyi, que fue descrita hace 10 años; esta planta tiene un color oscuro que pareciera negra.
Esto porque cada que se halla una nueva especie "hay presión sobre las poblaciones, las saquean y venden". Incluso, dijo, hay visitas guiadas que se organizan desde el extranjero para sustraerlas de sus localidades naturales.

jueves, abril 26, 2007

Buzos en la basura de la Gran Manzana


Contrario a lo que cualquiera se pueda imaginar, ellos no comen lo que encuentran en la basura porque estén en medio de la desesperación y la pobreza.


Dicen hacerlo como una declaración política y, aunque pocos esperarían hacerlo de esta forma tan sui generis , la verdad es que hay una comunidad entera en Nueva York que obtiene su comida de la basura, y lo hace por convicción.

Ellos son los Freegans , cuyo nombre y el de su estilo de vida, freeganismo , resultan de una combinación de las palabras inglesas free (gratis, libre) y vegan (vegetariano estricto).

Según Janet Kalish, quien además de freegan es profesora de secundaria, tienen razones de sobra para hacer lo que hacen.
"Los Freegans somos un grupo al que le preocupa mucho la manera como desperdiciamos en nuestra sociedad", le dijo a BBC Mundo.
"Hay un gasto tremendo de buena comida y de otros recursos y queremos enseñarle a la gente que esto está pasando, porque no es poco a poco sino urgente: estamos acabando con el planeta".

Noche de ronda
¿Pero comer de la basura? ¿No es acaso lo último que le pasaría por la mente a una persona que tiene la opción de obtener sus alimentos normalmente?

Es un asco para mucha gente ver que estamos sacando cosas de la basura y eso es normal", reconoció Kalish.
"Yo entiendo perfectamente, porque yo sentía lo mismo el primer día y, aunque siempre me había gustado ahorrar, entiendo que es diferente sacar algo de la basura", aseguró.

BBC Mundo estuvo recientemente con los Freegans en una de las rondas nocturnas que, desde principios de los años 90, realizan cada miércoles por las calles de Manhattan, una gira que, además de vencer un inusual frío de abril, incluyó paradas en tres supermercados, dos panaderías y una tienda de rosquillas.
No por coincidencia, todos los establecimientos estaban ubicados en el East Side de la ciudad, una zona que agrupa varios de los barrios más exclusivos de la Gran Manzana.

Reciclar alimentos
Poco después de iniciar el recorrido, frente a un supermercado, los resultados fueron evidentes.

No llevaban diez minutos escarbando en la basura cuando este grupo de alrededor de 15 freegans se aseguró cada uno su porción de verduras, galletas, panes, productos enlatados, frutas y jugos, entre otras cosas.

Un joven que se identificó como Charlie y cuya forma de vestir y hablar evoca más a los activistas que suelen protestar las cumbres del G-8 que a los pacifistas de los años 60, le explicó a BBC Mundo cómo se puede reciclar alimentos de la basura.
"Esta papa, por ejemplo, tiene una mancha pequeña en este lado, pero sólo es cuestión de lavarla, cortarla y ponerla a hervir. Eso no es para nada peligroso".

Contra la economía capitalista
Un grupo de mujeres que buscaba incisivamente en un grupo de bolsas celebró un hallazgo.

"¡Encontré una caja de lechuga orgánica sin destapar y que no vence hasta dentro de dos días!", comentó emocionada una de ellas, Rebecca Dahl.
"Acá tengo también una caja entera de manzanas verdes y una bolsa llena de tomates", agregó sonriendo.
El freeganismo no sólo se refiere a la comida.
Reciclar bicicletas, ropa y muebles, constituyen otras de las formas en la que los freegans desafían el control e influencia que el sistema y las grandes corporaciones tienen sobre su vida.
A fin de cuentas, lo importante para los freegans no es conseguir la comida gratis o las bicicletas o la ropa o los muebles.
Lo que pretenden es no inyectar más dólares a la economía capitalista.

lunes, abril 23, 2007

Con la sensibilidad a flor de piel.

Ayer me dormí temprano, buscando un descanso absoluto, no lo encontrè, al contrario, hoy estoy cansada. Me siento mal no se porque. Lo peor de todo es que no se ni como expresar todo esto. No hallo ni una sola palabra. Mi corazòn se ha resistido. Me he dado cuenta de que a puños y fuerza he puesto un cerco de piedras alrededor de mi corazón. Lo encerré. No sé porqué. Tal vez es el miedo a lastimarme una y otra vez. Se que no podré vivir eternamente con ese sentimiento, porque aparte de que no soy así, me mentiría a mi misma. Pero el temor al rechazo, el miedo a expresar que lo que estoy pensando, sintiendo y soñando es verdad. Tengo miedo, esa es la verdad... Tal vez los prejuicios de mi familia tengan mucho que ver. La forma de ser de las mujeres de mi familia, me hacen ver que yo no soy igual que ellas y como no soy igual que ellas me da miedo, porque eso ya es parte del rechazo. ¿En que forma no soy igual? Ella son secas, se hacen las fuertes por dentro, no expresan lo que sienten cuando estàn enamoradas... quisiera ser igual que ellas, pero cada vez que lo intento, tengo una revolución dentro de mi ser... la naturaleza me creó diferente, me creó con fuego, pasión, sentimiento... dentro de mi...
Conclusión: es mejor buscar por otro lado... y quiero llorar... y no sé... que horrible es hacerse ilusiones... pero la vida... la vida continua... ^-^

Smile Yunix... :D

miércoles, abril 18, 2007

Yo soy yo

Las palabras “Yo soy...” son potentes; ten cuidado
a qué las amarras. Aquello que estás reclamando
tiene la habilidad de devolverse y reclamarte a ti.

A. L. Kitselman


Yo soy arquitecto: he construido un cimiento sólido, y cada año que voy a ese colegio agrego otro piso de sabiduría y conocimiento.
Yo soy escultor: he dado forma a mis principios morales y a mis filosofías de acuerdo con la arcilla del bien y del mal.
Yo soy pintor: con cada nueva idea que expreso, pinto un nuevo tono en la multitud de colores del mundo.
Yo soy científico: con cada día que pasa recojo nueva información, hago observaciones importantes y experimento con nuevos conceptos e ideas.
Yo soy astrólogo: leo y analizo las palmas de la vida a cada persona que encuentro.
Yo soy astronauta: constantemente exploro y amplio mis horizontes.
Yo soy médico: curo a aquellos que vienen a consultarme y a pedir consejo; además, lleno de vitalidad a aquellos que han perdido el deseo de vivir.
Yo soy abogado: no me atemoriza defender firmemente mis derechos básicos e inalienables, como también los del prójimo.
Yo soy oficial de policía: siempre estoy pendiente del bienestar de los demás y siempre me encuentro en el lugar preciso para evitar peleas y mantener la paz.
Yo soy profesora: mediante mi ejemplo muchos aprenden el significado de las palabras dedicación. Trabajo tesonero y firmeza.
Yo soy matemático: estoy dispuesto a conquistar cada uno de mis problemas con las soluciones apropiadas.
Yo soy detective: escudriño el mundo a través de mis dos lentes y busco el significado y el sentido de los misterios de la vida.
Yo soy miembro del jurado: juzgo a los demás y sus circunstancias, sólo después de haber escuchado y entendido, sus historias en su totalidad.
Yo soy futbolista: estoy listo para hacer una gambeta que emocione al público y par meter el gol en la portería contraria.
Yo soy banquero: muchos comparten conmigo su confianza y sus valores, y jamás pierden el interés.
Yo soy corredor de maratón: siempre estoy en movimiento y lleno de energía, dispuesto a enfrentar el próximo reto.
Yo soy alpinista: a paso lento pero seguro, camino hacia la cima.
Yo soy equilibrista: siempre logro llegar al extremo opuesto, midiendo cada paso cuidadosa y suavemente en cada situación peligrosa.
Yo soy millonario: rico en amor, sinceridad y compasión. También soy poseedor de una inmensa reserva de sabiduría, conocimientos, experiencias e ingenio.

Pero más importante aún, yo soy yo

domingo, abril 15, 2007

Viejas historias de amor

Abrí la página virtual de la revista Selecciones, mientras buscaba un artículo interesante para compartir con mis alumnos. Vi la lista de artículos y me encontraba varias historias de diversos géneros, todos interesantes. Ninguna parece la idónea para un grupo de muchachos inquietos...estudiantes al fin...
De repente viene a mi mente el último episodio de mi vida, mi última historia de amor, que así como vino llegó, no tuvo nada de interesante, ni el principio, no tuvo nada de romántico... tal vez fue emocionante... no la historia de amor que cualquier "princesa del siglo XXI" sueña, el final fue el esperado o quizá el que la sociedad moderna espera: él se mostró desinteresado en ella, ella lo terminó, siguieron sus vidas... y meses después enterarse de que él... le puso la luna, en cuarto creciente, sobre la cabeza...
Y encuentro una historia sobre dos amigas, eso me hace recordar a mi vieja amiga Esther, vieja lo digo porque hace mucho que somos amigas, no porque seamos viejas (risas). Leo la historia y me doy cuenta de que entreteje una historia de amor. Una de las protagonistas recibe una carta de un hombre que ni tan siquiera la conoce y se va a buscarlo, lo encuentra, lo ve a los ojos y desde ese momento se da cuenta de que es el amor de su vida... y sigue la historia.
He leido tantas historias así que a veces me pregunto cuando fue la última vez que viví una historia como esa y entonces la recuerdo... fue hace mucho (2001) y tal vez ha sido la única que guardo en mi memoria como una "historia de amor", de las de "adeveras", tal vez no hable mucho de ella, porque forma parte de mi corazón y de mi alma.
¿Qué sólo existen en las novelas? tal vez para algunos que no saben distinguir realidad de ficción... pero cada quien decide como quiere vivir su vida, como un sueño divino o como una realidad dura...
El amar es una decisión, no un sentimiento que viene y va, es vivir el "romanticismo" en su verdadero contexto, con el saber de que es un principio, tales como la responsabilidad, la valentía, la fuerza, etcétera.
Y entonces sigo en la búsqueda de historias de amor y me encuentro con muchas de ellas, historias donde el egoísmo y la vanidad y todas las cosas que envuelven a nuestro mundo moderno, no existian. Hasta la historia de Isaac y Rebeca me suena a historia de amor.
Podrían pensar de que con la experiencia que conté al principio ya no creería en las Historias de amor, pero aún las creo, mi familia es una historia de amor ;) y no precisamente del amor que pensamos (risas) amo a mi papá, amo a mi mamá, amo a mi hermana, amo a....
Considero que las historias de amor todavía existen...
Ja, ja, ja... me pasó algo que me recordo la única verdadera historia de amor que he vivido.... y es que lo vi y algo me llamó la atención...
... pero esa es otra historia...
quien sabe si de amor o no sé...
pero no hablaré....

miércoles, abril 11, 2007

El dia que debo llorar...


no habia podido hacerlo...
estaba demasiado ocupada como para poner atención a este hecho...
me siento engañada, frustrada...
pensé que tú no eras así...
pensé que eras un amigo de verdad...
pensé que jamás jugarías con mis sentimientos
como parece que lo has hecho..
quisiera no juzgarte, pero la rabia que me da...
merece ser sacada y parece que la única forma
es escribir... y escribir... y escribir....
es terrible ver que todo el esfuerzo que haces x algo
se hace añicos...
y no puedo creerlo...
todavia...
me sentí desvalorada...
pensar que...
en un mes!!...
claro...
como puedes estar solo??...

que triste es despertar
y ver la realidad...
ver que es mentira
lo que sentias
saber que es final
que triste es ver caer
esa pared que ayer
me resguardaba
y no me dejaba ver lo que hacias...

Como se cura una herida?
cuando perdonar es tan dificil
cuando olvidar no se consigue
como enfrentarse a la vida?
con el corazón hecho pedazos...
cuando la desilusión te quiebra el mundo
y pega un golpe bajo
nunca imaginé llorar tu engaño...

En medio del dolor
mi fuerza fue mi fe...
y en mi lamento
buscando aliento
miré hacia el cielo....

No puedo reclamar... para que??
solo puedo llorar y tratar de remendar
este agujero... que tengo...
parecerá tonto llorar sobre la leche derramada...
ojala que seas feliz... yo lo soy...
pero a veces hay cosas que no entiendo...
y no se ni como explicarlo...

fui demasiado tonta al pensar que te conocia
y que podría ser tu amiga...
fui demasiado tonta al creer que podíamos...
fui demasiado tonta al creer lo que decias...
fui demasiado tonta al esperarte...
y no me arrepiento...
sabes x que??

porque fui sincera...
x que se que nunca te mentí ni te engañé...
porque fui una piedra cristalina
y a pesar de que a veces me mentias...
o me ocultabas las cosas...
nunca te reclamé x que pensé que te queria demasiado
como para hacer caso de nimiedades...
pero para que reclamar??

hoy fue el dia de llorar y sacar todo lo que tenia adentro escondido...
de llorar porque nunca te importo nada...
de llorar porque sigo adelante...
de llorar porque aunque se que sigo viva ( siempre me recupero)... también me duele saber que yo siempre te consideré un amigo al que no podía dañar ni lastimar... pero tú nunca pensaste lo mismo...
eres egoista y muchas veces te importas mas tu que los demás...
nunca pensaste si me dolia o no..
solo pensaste en no quedarte solo...
y aunque a veces puedo ser fuerte también lloro y me duele x dentro, pero me aguanto... x que soy vulnerable y sensible...
se feliz...
yo también soy feliz porque se que Dios es mi única fortaleza y el Único Ser en quien puedo confiar...
si no te hablo es porque debo todavia remendar algunos parches en mi corazón... cuando se destruye la confianza hay que rellenar los baches, sacar el odio y olvidar los malos sentimientos...
tal vez no te importe... pero es que... eso... no es de caballeros...

Mis libros favoritos

  • La batalla de cada mujer joven
  • El conflicto de los siglos
  • Fuerza para vencer
  • Patriarcas y Profetas
  • Si mi pueblo orara
  • El nos amaba
  • Dejando un sueño prendido
  • Piloto misionero
  • Los hijos de la Selva
  • La Biblia (Salmos, Proverbios y Cartas de Pablo)